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| Adolfo Quiles en el huerto ecológico de la Cuerna, Elche. |
“Todos los ecosistemas y las especies se
adaptan, y nosotros estamos frenando esa adaptación”
Margalló es un grupo ecologista de
Elche. Pertenece a la confederación ‘Ecologistas en Acción‘, en la que hay más
de 300 grupos ecologistas y forma parte del llamado ecologismo social. Su
objetivo es hacer de Elche y su entorno, y en general, de este mundo, un lugar
más humano y habitable, defendiendo tanto los derechos de las personas como el
del medio ambiente. Entre sus miembros se encuentra Adolfo Quiles (Elche, 1968),
especialista en huertos urbanos y monitor de deportes del Ayuntamiento de
Elche, donde organiza campañas de senderismo y de montaña, dirigida a los
ilicitanos. Comparte su preocupación por la plaga de picudo rojo que está
azotando el palmeral de Elche. Asegura que el coleóptero no se va a marchar de
aquí y que tenemos que combatirlo desde la prevención porque la lucha química
no es la solución.
P:
¿Qué propone Margalló para luchar contra el picudo rojo?
R:
En primer lugar, siguiendo los principios de la agricultura ecológica Hay que
tener en cuenta que no va a desaparecer nunca el escarabajo de aquí. Vamos a
centrarnos en el tema de la prevención y de que haya un servicio de recogida de
palmeras que están infectadas, un servicio de detección como el que no hay
actualmente. Hay una lista de espera, que si llamas por teléfono pueden tardar
más de un mes en ir a retirar la palmera.
P:
Según algunos afectados, casi dos años de lista de espera…
R:
Eso me parece exagerado, pero es que solo hay un equipo de Consellería, la
empresa Tragsa, que está encargándose del triturado de las palmeras. Hay una
trituradora en Elche y otra en el norte de la provincia. La lista de espera es
normal sobre todo ahora que están cayendo muchas. Mientras tanto todavía te
puedes encontrar en la zona del Hondo y en la Vega Baja, viveros de palmeras
abandonados y estos son focos de picudo, que es una especie que vuela
kilómetros en una mañana. Se está propagando el escarabajo por todos lados y no
hay forma de controlarlos. Se debería ir rápidamente cuando se detecta una
palmera afectada, quitarla del terreno y triturarla o enterrarla. La
Consellería de Agricultura hace menos de un año sacó a concurso público la
adjudicación de la contrata para comprar productos químicos y se han gastado
“una pasta” en Imidacloprid para dárselos a los ayuntamientos y que estos
apliquen estos tratamientos. Pero están fumigando las palmeras que tienen menos
de cuatro metros porque son las más cómodas y ¿las palmeras altas y las de los
huertos privados? Porque los propietarios no están por la labor de pagar un
dineral.
P:
Pero la fumigación parece que no funciona.
R:
¿Sabes qué es la fumigación? Esto es un lavado de imagen. Las revisiones no son
buenas. Esto es un campo en el que se debería seguir investigando para encontrar
remedios ecológicos que no tuvieran daños para la salud o para otras especies.
Y lo primero que han hecho cuando ha llegado el picudo ha sido cepillarse la
Estación Phoenix.
P:
¿Cuál es su opinión sobre la pintura Inesfly? Ya que la van a aplicar para
luchar contra el picudo rojo. ¿Qué componentes lleva esta pintura?
R:
La pintura lleva un componente tóxico y que es posible que de aquí a poco
tiempo esté prohibido. De hecho el componente activo que lleva tiene, creo
recordar que es un clorpirifos, es un organofosforado, que era el componente
que precisamente quería utilizar conjuntamente con el Imidacloprid el
Ayuntamiento de Elche para la fumigación. La Comunidad Valenciana le dijo que
no lo hiciera porque esto es una bomba y es posible que se prohíba pronto. Le
recomendó que usara solo el Imidacloprid. La pintura Inesfly está compuesta por
microcápsulas de clorpirifos que solo se activan cuando el escarabajo se posa
encima de ella o se coma las palmeras. El componente activo está ahí, no sé
hasta qué punto puede pasar al agua cuando llueve y puede contaminar acuíferos.
Es un tema delicado. Se ha comprobado que estas sustancias que se utilizan no
son inertes, que pueden llegar por el liofilizado a las aguas subterráneas y
durar bastante tiempo y dar una serie de consecuencias que pueden ser
problemáticas.
P:
La pintura dura de un año a 15 meses. En Elche hay viveros que están probando
esta pintura.
R:
Para mí todo esto son parches. Hay que afrontar la situación. Primero hay que
tener claro que no va a desaparecer nunca el picudo de aquí, que tenemos que
aprender a convivir con él y que la única forma de que esto tenga un control es
que se autorregule ecológica y naturalmente.
P:
¿Qué opina de los tratamientos de nematodos y de hongos que están probando?
R:
Esto es un tratamiento ecológico. No han inventado nada. El nematodo y el hongo
son tratamientos que se utilizan en agricultura ecológica. Se está investigando
y comprobando que también tiene aplicación para el picudo rojo. El
nematodo es un predador natural. Es un gusano microscópico que infecta el
escarabajo y este muere.
P:
Como es un coleóptero nuevo en esta zona no tiene predadores.
R:
Cuando una especie nueva se introduce en el lugar no tiene predadores, pero hay
un momento en el que la plaga se expande como lo está haciendo el picudo rojo,
a lo bestia, porque tiene a sus anchas por donde campar. Luego, se agrava con
un monocultivo como es el palmeral. Esta no es una población dispersa como la
que tiene Canarias. Pero aquí tenemos en un espacio reducido 80.000 palmeras juntas,
esto es un gran problema.
P:
Un zoólogo consultado asegura que la plaga no es importante, porque las
palmeras son ornamentales.
R:
Efectivamente, no es un problema tan grande porque no tenemos que comer de
ellas, pero claro que hay una industria turística detrás. Pero sí que son
importantes.
P:
¿Qué tratamientos propone Margalló para las palmeras y el picudo rojo?
R:
En primer lugar tratamientos que sean ecológicos, que no tengan ningún tipo de
afección ni pueda tenerla. Ahora dicen “esto es inofensivo”, pero lo mismo
decían del DDT hace 40 años y de otros productos autorizados y ahora los están
prohibiendo. Todos los años la CE sigue sus líneas de investigación y
determinados productos químicos los prohíbe porque comprueban sus efectos
adversos. Es posible que a esto que están utilizando ahora le pase lo mismo
dentro de unos años, porque para las abejas es una bomba y ya se han prohibido
en algunos países porque pueden acabar con sus colonias. Dicen que no tiene
importancia pero sí la tiene porque la producción agrícola en un 40% depende de
ellas. Además está comprobado que si utilizan de forma reiterada un determinado
producto genera resistencia en los insectos, con lo cual los que sobreviven son
más fuertes y tienen que utilizar un producto químico más fuerte. No puedes
supeditar el que no enferme la palmera a estar continuamente fumigándola. Esa
no es la solución y hasta que no nos demos cuenta de eso…
P:
Pero la palmera no se puede defender del
picudo.
R:
Eso es un error. Todos los ecosistemas y las especies se adaptan y nosotros
estamos frenando esa adaptación. Esa adaptación de la palmera a que se cree una
resistencia al picudo. Aquí llegará un momento en el que si les dejáramos
actuar, no es que estemos proponiendo esto, si no hiciéramos absolutamente
nada, no se van a acabar todas las palmeras. Tienen que investigar que hay
palmeras que atraen más que otras a los insectos. Por qué las palmeras canarias
atraen más es por una sustancia química que desprende.
P:
¿Por qué hay palmeras que atraen más al picudo que otras?
R:
Porque se defienden. Hay que intentar que las palmeras que queden sean las más
resistentes al picudo o sean capaces de defenderse de alguna forma. A parte de
que haya predadores naturales o no, todo lleva su tiempo. La Naturaleza lleva
millones de años evolucionando para que las especies sean resistentes y haya un
equilibrio. Nosotros hemos roto ese equilibrio.
P:
Pero el porcentaje de palmeras infectadas es muy alto.
R:
No hay tantas que se infectan. Si vas a un vivero de palmeras infectadas puede
haber un 20% con picudo. El caso es que todo el mecanismo natural de regulación
lo hemos trastornado.
P:
Hay expertos que aseguran que lo que hay que hacer es usar varios tratamientos
a la vez.
R:
Si seguimos con esa idea de tratamientos…A mí me encanta el palmeral, yo quiero
que sigan habiendo palmeras pero no a costa de mi salud ni de un deterioro
ambiental que puede ser muy grave a largo plazo. Y siguen jugando con esto.
Podemos hacer cosas en el campo de la prevención. En esta lucha hay que
investigar en los tratamientos. Pero desde luego la panacea no la vamos a
encontrar.
P:
¿El Ayuntamiento de Elche les consulta o habla con ustedes?
R:
Al concejal de Parques y Jardines le hemos remitido en dos ocasiones una carta
solicitándole una entrevista pero pasa de nosotros. Hicimos una nota de prensa
cuestionando lo que estaban haciendo y nos dio por todos los lados. El
Ayuntamiento no quiere nada de nosotros, nos dice que estamos atacándole, que
somos unos irresponsables y que estamos generando el pánico en la población. En
fin.
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